Siete recomendaciones de novelas para acabar el año leyendo a lo loco
Escrito por Abril Camino - 14 diciembre
Toc, toc. ¿Queda alguien ahí? No podría culparos si habéis huido de este blog, nunca me había pasado tanto tiempo sin escribir por aquí. Pero prometo compensarlo escribiendo cada jueves durante todo el año... vale que solo quedan tres jueves, pero juro que voy a cumplir. Y voy a empezar con lo que siempre me decís que más os gusta: ¡recomendaciones de libros! En junio os hablé de mis seis novelas favoritas de los primeros meses del año, y ahora vamos a hacer lo mismo con los seis últimos. Lo que más me ha gustado de lo que he leído últimamente. ¡Vamos allá!
Cartas desde la isla de Skye, de Jessica Brockmole
He tenido que esperar a (casi) final de año para encontrarme una de mis lecturas favoritas del año (y de mi vida). Llevaba un tiempo de crisis lectora, de esas épocas en que nada acaba de llenarte, y Cartas desde la isla de Skye me rescató.
Como su propio título sugiere, es una novela epistolar, en la que descubriremos la relación que se va gestando entre una poetisa que vive en la remota isla escocesa de Skye y un joven norteamericano que la admira, todo ello en la época de la Primera Guerra Mundial. Veinticinco años después, las cartas siguen existiendo, aunque esta vez la protagonista es otra (la hija de la poetisa) y el contexto es otra guerra (la Segunda Guerra Mundial). Se lee rápido –al menos yo la devoré– y te mantiene el corazón en vilo en cada página.
Desde mi cielo, de Alice Sebold
Llevaba años en mi lista de pendientes y reconozco que no me fascinó tantísimo como esperaba. ¿Que por qué la recomiendo, entonces? Porque sé que fue una sensación subjetiva (la crisis lectora de «nada me gusta, mimimimi» de la que os hablaba) y que la novela es maravillosa.
El tema de Desde mi cielo es duro: una chica de catorce años es asesinada y cuenta desde el cielo lo que le ocurrió y también la evolución que sigue su familia desde ese horrible momento. Está escrita de una forma preciosa, el argumento no puede ser más original y los personajes son de esos que no se olvidan fácilmente. Yo ya la he metido en la lista de relecturas imprescindibles.
La chica que dejaste atrás, de Jojo Moyes
Ay, Jojo, qué alegrías y disgustos me das, a partes iguales todo ello. Si me enamoré como una desgraciada (y voy por la cuarta relectura) de Yo antes de ti y la odié profundamente con su secuela (horrible) y con El bazar de los sueños (una de las pocas novelas que he abandonado este año porque, en serio, no podía con mi vida leyéndola)... con La chica que dejaste atrás, volvió a tocarme la patata muy fuerte.
Parece que este año estoy obsesionada con la ambientación en las dos guerras mundiales y... puede ser. Porque esta novela también nos sitúa en la Primera, con una historia de la Francia ocupada y de un cuadro muy especial... que reaparecerá en Londres casi un siglo después. Amores truncados y el horror de la guerra son los dos temas principales de una historia tan bien trazada que es de esas que solo me hacen pensar «¿por qué c*** no se me pueden ocurrir a mí estas cosas?». Recomendadísisisisima.
La probabilidad estadística del amor a primera vista, de Jennifer E. Smith
Lo confieso: hay novelas que elijo por el título. Esta es una de ellas. Siempre me llamó la atención cuando lo veía por GoodReads y al fin me decidí a leerlo. Si buscáis algo rápido, original y entretenido, La probabilidad estadística del amor a primera vista es vuestra novela. No voy a decir que me emocionó tanto como las demás que menciono en esta lista, pero me divirtió, me entretuvo y, sobre todo, me pareció que partía de una premisa original... y ya estoy un poco harta de esa sensación de que estoy leyendo siempre lo mismo.
Un viaje a Londres que acaba convertido en un instalove de manual (¿por qué no puede un instalove emocionarnos?), nacido de un montón de casualidades y caprichos del destino. Mi consejo es que le deis una oportunidad con la mente abierta, y creo que no os decepcionará.
El día que dejó de nevar en Alaska, de Alice Kellen
Aaaay (suspirito). Nilak y Heather. Creo que, a estas alturas de la vida, ya no es un secreto para nadie que Alice Kellen es mi amiga, así que tuve la enorme suerte de leer esta novela antes de que se publicara. Y qué preciosidad, por Dios. Se lo dije a ella cuando la acabé y lo mantengo: es algo más que una novela romántica. Es una maravilla, y probablemente lo mejor que ha publicado Alice hasta la fecha.
En El día que dejó de nevar en Alaska, Heather necesita huir de sus fantasmas y se marcha a un lugar remoto a hacerlo. A un pueblo de Alaska, en el que se encontrará con un elenco de personajes (entre los que está Nilak, of course) que la ayudarán a descubrirse y a reconstruirse. La ambientación en Alaska es de esas que hacen que, al cerrar la novela, empieces a mirar precios de vuelos porque ya te da igual hasta el frío y todo. Si el viaje puede venir con un Nilak incluido, será perfecto. En serio, no sé ni qué hacéis aún en el blog cuando podríais estar leyéndola 😉.
El baile de las luciérnagas, de Kristin Hannah
Kristin Hannah me enamoró a principios de este año con El ruiseñor, y tenía pendiente El baile de las luciérnagas para seguir disfrutando de la que, para mí, es una de las escritoras actuales con más talento y mejor capacidad para transmitir sentimientos.
Esta novela es un canto rotundo a la amistad. A la amistad entre dos mujeres que se conocen desde que eran unas crías y que tienen una relación de esas que probablemente todas hemos vivido alguna vez: la de una amiga que es más una hermana y a la que odias por momentos, pero quieres con locura siempre. Es la historia de una vida, de dos vidas, de cómo dos personas muy diferentes van pasando por los diferentes avatares del destino y cómo la amistad permanece por encima de todo, incluso de sí mismas.
Bonus track: bajo vuestra propia responsabilidad
Tatiana y Alexander, de Paullina Simons
Vamos a ver cómo lo explico. La trilogía de Tatiana y Alexander se compone de tres libros: El jinete de bronce, Tatiana y Alexander y El jardín de verano. Y, a pesar de que, normalmente, una serie suele gustarme (más o menos) como conjunto... en esta me ocurrió todo lo contrario. Puedo resumirlo así: el primero me gustó con reservas, el segundo me fascinó y el tercero prefiero olvidar que existe. Así de radical todo. En esta trilogía conoceremos a Tatiana y Alexander, en el contexto del Leningrado (San Petersburgo) sitiado al comienzo de la participación rusa en la Segunda Guerra Mundial. Si os gustan las historias de amor épicas, esta, sin duda, lo es.
Reconozco que las altísimas expectativas que tenía en el primer libro hicieron que me decepcionara un poco, sobre todo por algunos errores de documentación que me sacaron un poco de la lectura y, especialmente, porque a mitad de novela hay un cambio de tono que me descolocó muchísimo. Aún así, sería un notable alto. Luego llegó Tatiana y Alexander y me pareció tan bonita, emocionante y épica que casi me desmayo leyéndola. Si fuera un libro independiente, probablemente sería mi favorito del año. Y por último... toooodo lo que pudimos enamorarnos de los protagonistas y su historia en las dos primeras novelas se lo cargan en el tercero, una especie de epílogo eterno (yo lo abandoné a la mitad más o menos porque me estaba poniendo enferma) en el que todo lo bueno que tenían los personajes en los dos primeros se convertía en defectos horribles en el tercero (y por «defectos horribles» hablo de cosas como justificación de maltrato o de violaciones, no digo más). Lo dicho: bajo vuestra propia responsabilidad. Puede encantaros o decepcionaros o, como yo, no tener ni idea de lo que sentís por esta trilogía.
Y recordad que, si nada de esto os convence o si ya los habéis leído o no os apetecen o lo que sea... también os dejé por aquí hace unas semanas los siete libros-descubrimiento de autoras noveles, que también son una opción genial. Venga, a leer todo el mundo, que no os podéis quejar de falta de recomendaciones.
¿Qué me contáis? ¿Habéis leído alguno? ¿Coincidimos en gustos?
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